TRES VECES REBELDE

Hace unos meses leí una novela que me fascinó y que al trabajar alguno de los temas expuestos en el módulo 1 de este curso, me ha venido a la cabeza. Cuatro mujeres con discapacidad intelectual conviven en un piso tutelado. Mujeres con discapacidad. En su día a día tienen que lidiar con las deficiencias de un sistema que, por su (doble) condición de pertenencia a un grupo discriminado, pretende controlarlas a todos los niveles: situaciones cotidianas como hacer la compra, participar de actividades sociales, relaciones sexo-afectivas, decisiones personales, etc. Un sistema que perpetúa las desigualdades ya existentes, y parece considerar que estas mujeres no son ciudadanas de pleno derecho. La autora muestra de manera cruda y directa la urgente necesidad de transformar las bases del sistema judicial y el orden institucional en nuestro país, que no solamente es patriarcal, también es paternalista y ejerce maltrato y violencia contra las mujeres.

A veces la realidad supera la ficción y el tema sobre el que quiero reflexionar (que es el que conecta la novela con el temario del curso) es la castración forzosa de mujeres con discapacidad. Creo que podría ser un buen ejemplo de una discriminación interseccional, puesto que estas personas son mujeres y además tienen una discapacidad. Esta aberración y atentado contra los Derechos Humanos y que acaba de ser prohibido en España (creo que llegamos un poco tarde), se ha dado también en muchos otros países del mundo. No solamente se ha ejercido sobre mujeres con discapacidad, también sobre mujeres indígenas o pertenecientes a etnias minoritarias (de nuevo hablamos de la intersección). Véase los casos de Perú (esterilizaciones forzadas durante el mando de Fujimori y su sucesor Alejandro Toledo); Suecia, Dinamarca, EEUU, etc. 

Pero para poder llevar a cabo esta atrocidad, las autoridades previamente, han de incapacitar a la persona en cuestión. Así tienen el sustento necesario para legitimar tan brutal acto. Y así lo han venido haciendo hasta que, afortunadamente, la modificación del Código Penal para la erradicación de las esterilizaciones forzosas de personas con discapacidad incapacitadas judicialmente, impedirá que se sigan haciendo estas barbaridades.

Se trata, además, de una discriminación directa y oculta (porque claro, no va un juez a reconocer abiertamente que la orden de incapacidad dada a fulanita de tal con el objetivo de esterilizarla forma parte de un plan eugenésico digno de la mismísima Aurora Rodríguez), puesto que muchas veces se intenta maquillar la realidad alegando que la esterilización es "lo mejor"  o "por el propio bien" de la mujer en cuestión, aunque esto no sea realmente un motivo sólido de justificación. Es más, nadie les ha preguntado a ninguna de estas mujeres si tienen alguna intención o interés en ser madres. No tienen voz ni voto en sus propias vidas. Y se da por sentado que tampoco tienen vida sexual.

Estamos ante un acto de violencia sistémica, estructural, obstétrica y sexual que ha estado legitimada durante mucho tiempo incluso por la propia estructura médica. La sexualidad de las personas con discapacidad, en especial de las mujeres, sigue siendo un tema tabú y que genera mucha controversia. Si eres mujer, tienes discapacidad y encima te gusta follar...Apaga y vámonos! Tres veces rebelde, como diría la Marçal.

"A l’atzar agraeixo tres dons: haver nascut dona,

de classe baixa i nació oprimida.

I el tèrbol atzur de ser tres voltes rebel."

-Maria Mercé Marçal-

Dejo aquí varios enlaces de interés por si a alguien le apetece leer más sobre el tema.

https://www.pikaramagazine.com/2019/04/esterilizaciones-forzosas-mujeres-con-discapacidad/

https://elpais.com/diario/2000/03/29/internacional/954280813_850215.html

https://www.fundacioncermimujeres.es/es

https://www.yeswefuck.org/